Sunday, February 13, 2011

La Coherencia Ideológica de los Partidos Políticos Brasileros

Hace algunas semanas comenté en este blog dos estudios acerca de la evolución ideológica y política en Latinoamérica. En el primero de ellos (1) se muestra la dificultad que enfrentan los electores brasileros para ubicarse a sí mismos en el espectro ideológico izquierda-derecha, así como algunas de las consecuencias que esto trae en términos de sus elecciones políticas. El segundo trabajo (2) desarrolla la hipótesis de una reducción en la confrontación ideológica a nivel regional; recientes encuestas de opinión y resultados electorales evidencian una tendencia hacia el centro, acompañada de un proceso de convergencia en términos de la aceptación del modelo económico y las prioridades sociales.

Aunque en el primero de estos artículos mencionaba el multipartidismo como una posible explicación del resultado encontrado, esta hipótesis no se desarrolla plenamente. No obstante, si los resultados de ambos estudios son correctos, es de esperarse que los partidos políticos jueguen un papel fundamental en términos de la falta de identidad ideológica, así como del movimiento hacia el centro del espectro izquierda-derecha. Un estudio de Kevin Lucas y David Samuels de la Universidad de Minnesota, precisamente estudia esta hipótesis (3).

La investigación es dirigida al caso de Brasil y busca establecer si sus partidos políticos son débiles y el sistema partidista rudimentario, o si, por el contrario, hay algún indicio de fortaleza de los partidos. Para responder esta pregunta algunos estudios anteriores utilizan opiniones de expertos o información según la cual los congresistas ubican su propio partido, los demás partidos, y se ubican a sí mismos en el espectro ideológico. Entre las conclusiones de estas investigaciones anteriores se encuentra que los principales partidos políticos brasileros pueden ser organizados claramente entre izquierda y derecha y que su ordenamiento ha sido relativamente estable desde la transición a la democracia. Lucas y Samuels, no obstante, cuestionan este resultado.

A diferencia de los estudios anteriores, su enfoque consiste en utilizar las respuestas de los congresistas durante los últimos veinte años a múltiples preguntas. Estas incluyen temas como el papel del ejército en la sociedad, autoritarianismo y democracia, poderes presidenciales, estructura partidista, sistema económico, descentralización, campañas electorales, y evaluación a importantes políticos, entre otros. El estudio se concentra en los cuatro partidos políticos más importantes durante este período: Partido de los Trabajadores, PT; Partido de la Democracia Socialista de Brasil, PSDB; Partido del Movimiento Democrático Brasilero, PMDB; y Partido del Frente Liberal, PFL. Como técnica los autores utilizan el análisis de función discriminante, a fin de determinar las variables (respuestas a las preguntas mencionadas) que discriminan entre los posibles partidos políticos.

El resultado principal del estudio es la identificación de dos grandes bloques: uno conformado únicamente por el PT, y otro donde se encuentran todos los demás partidos. Como era de esperarse, el PT se encuentra hacia la izquierda del espectro ideológico, mientras que los demás –PMDB, PSDB y PFL- ocupan una posición hacia el centro-derecha, estadísticamente indistinguible entre ellos. Es decir, se derrumba el argumento de un discurso coherente y diferenciado entre los principales partidos políticos; a excepción del PT, todos los demás comparten sus posiciones y orientación ideológicas. Otro resultado interesante es el desplazamiento hacia el centro que el PT ha mostrado desde la llegada de Lula al poder en 2003, así como el movimiento del PFL durante los últimos 12 años pasando de una clara posición de derecha a una posición más hacia el centro.

Estos dos resultados coinciden con los de aquellos de los otros dos estudios mencionados al inicio: por un lado se reduce la identificación ideológica de los partidos más importantes, lo cual, como vimos, dificulta la identificación del electorado. Por otro lado, tanto la izquierda como la derecha se mueven hacia opciones más de centro, lo que reduce el espacio para el debate ideológico. Es decir, se alcanza cierto acuerdo entre los resultados económicos y sociales deseados, así como en los métodos para conseguirlos.

Como mencioné en mis entradas anteriores, si bien hay varios aspectos positivos de estos dos resultados, las consecuencias negativas no son nada despreciables: primero, al ser más difícil para los electores identificarse con uno u otro partido, estos se vuelven presa fácil de políticos oportunistas que sólo buscan atender sus necesidades inmediatas. De igual forma, cuando desaparecen las diferencias entre las posibles opciones, se deteriora la calidad en la representación y el rendimiento de cuentas por parte de los partidos.

Adicionalmente, al desaparecer la confrontación ideológica, el carisma y otras características personales de los líderes entran a jugar un papel más importante que las ideas y el discurso político; algo indeseable en una región tan proclive a la aparición de caudillos y con unas instituciones democráticas aún en proceso de consolidación. Finalmente, la convergencia ideológica hacia el centro genera la sensación de un acuerdo en torno al debate ideológico y, por consiguiente, descuida problemas importantes como las amenazas latentes en temas de seguridad o aquellos relacionados con el tráfico de drogas; un ambiente más heterogéneo, por el contrario, permite abordar estos problemas desde diferentes perspectivas, así como estar más atentos a las nuevas amenazas.

Aunque el estudio se centra únicamente en el caso brasilero, hay claros indicios de tendencias similares a lo largo de la región. Esto invita no sólo a evaluar en qué medida estas tendencias se encuentran en otros países, sino también las consecuencias que esto trae en términos del fortalecimiento de la democracia y de solución a problemas persistentes como los mencionados arriba. En un ambiente tan contrariado como el de la región, no es nada satisfactorio pensar en el fin del debate ideológico.

Nota:
Una de las preguntas que surge de este análisis es acerca de las razones detrás de la evolución del PT hacia una opción más de centro -probablemente uno de los eventos políticos más importantes en la región durante las dos últimas décadas. Este será el tema sobre el que hablaré la próxima semana.
____________________________

Referencias:

(1) Ames, B., and Smith, A.E. Knowing Left From Right: Ideological Identification in Brazil, 2002-2006. Journal of Politics in Latin America, Vol 3, No. 3, 2010.

(2) Shifter, M. A Surge to the Center. Journal of Democracy, Volume 22, Number 1, January 2011, pp. 107-121., 2011.

(3) Kevin Lucas, David Samuels. The Ideological "Coherence" of the Brazilian Party System, 1990-2009. Journal of Politics in Latin America, Vol 3, No. 3, 2010.

1 comment:

  1. La Consolidación de sus Partidos Políticos hizo de Brasil una Gran Democracia, el Líder de América Latina y un Mandamás Mundial (dentro de la política); ojalá esta perspectiva brasilera se siga conservando por el bién de la región.

    ReplyDelete